El queso feta es un queso griego hecho de oveja o leche de cabra. Es un queso suave y salado, que se refina en agua o leche durante varias semanas. El queso feta tiene una textura cremosa y un sabor distintivo, que le ha ganado una gran popularidad en todo el mundo. Puede comer el queso feta en rodajas, cubos o trozos pequeños, ensalada, sándwich o tapas. También es muy popular en muchas recetas de cocina, como quiches, tartas, gratinas y platos a fuego lento. El feta es rico en proteínas y calcio, lo que lo convierte en un alimento beneficioso para la salud.