Para 4 personas
Para 4 personas
Comenzamos cocinando las alcachofas al vapor, teniendo cuidado de retirar los tallos y cortar la parte de las hojas por la mitad para una cocción más rápida.
Derretir la mantequilla en una cacerola, condimentar con sal y pimienta, luego agregar la harina fuera del fuego para hacer una salsa bechamel.
Con un batidor, remueve todo y vuelve a poner la cacerola al fuego durante un minuto. Una vez cocida la harina, vierte la leche en tres tandas, removiendo enérgicamente.
Cocine a fuego medio hasta que la salsa bechamel espese.
Retire las raíces terrosas de los hongos y pele la piel de la cebolla antes de cortarlos en rodajas o cubos.
Calienta aceite en una sartén y fríe los champiñones y la cebolla. Luego, retíralos de la sartén y sécalos con papel absorbente.
Retirar las hojas de las alcachofas, conservando sólo el corazón, y cortarlas en rodajas.
Antes de empezar, se recomienda precalentar el horno a 180°C o poner el termostato a 6. Luego, coger una fuente de horno y extender con cuidado una fina capa de salsa bechamel.
Toma una lámina de lasaña y corta otra del tamaño del plato. Agrega bechamel, una mezcla de alcachofas, champiñones y cebolla, y cubre con queso brousse. Sazona con una pizca de sal y una generosa cantidad de pimienta.
Continuar montando hasta utilizar todos los ingredientes y terminar añadiendo bechamel y queso brousse para obtener una textura crujiente después del horneado.
Colocar en el horno durante 15 minutos mientras la pasta se cocina y la superficie queda crujiente.