El almidón de papa es muy popular en la cocina por sus excepcionales cualidades de espesamiento y vínculo, lo que lo convierte en un ingrediente esencial de muchas recetas. A menudo se usa para espesar salsas, sopas o compotas, o para hacer postres, como cremas, musgos o pasta de pastel. También es muy apreciado por su riqueza en carbohidratos y proteínas, lo que le da un sabor nutritivo y satial.