Molokhéya es una planta herbácea conocida por sus hojas comestibles. Crece en las regiones tropicales y subtropicales de África, Asia y América del Sur. Molokhéya tiene un sabor ligeramente dulce y es rico en proteínas, fibra dietética y vitaminas y minerales esenciales. Sus hojas son particularmente ricas en hierro, calcio y vitamina C. En la cocina, Molokhéya a menudo se usa para preparar sopas y platos a fuego lento, especialmente en Túnez, donde se considera un plato nacional. También se puede usar como guarnición para platos de carne y pescado, o como base para salsas y aderezos.