Hay muchos tipos de jarabe, cada uno con su propio sabor y uso único. El jarabe de arce se obtiene hirviendo la savia de un árbol de arce hasta que se concentra y se grue. A menudo se usa para dar sabor a pasteles, bebidas calientes y platos de carne. El jarabe de maíz está hecho de maíz dulce y a menudo se usa para dar sabor a pasteles y bebidas. El jarabe de granadina está hecho de granadas y a menudo se usa para dar sabor a cócteles y bebidas carbonatadas.